Esta mañana en el programa de Carlos Herrera, en la Cadena COPE, Pedro Sánchez ha enfrentado la situación política por la que está atravesando España. El líder socialista ha anunciado que después de que el Rey Felipe VI no haya optado por ningún candidato y las formaciones políticas no hayan alcanzado un consenso, habrá que convocar nuevas elecciones. El plesbicito tendrá lugar el día 26 de junio y, tras él, Pedro Sánchez ha reconocido que será necesario pactar: “Pase lo que pase en las urnas, estaremos en el para qué y no con el con quién”.
Por el contrario, su opinión respecto al resto de líderes políticos ha cambiado en estos meses. En cuanto a Pablo Iglesias, ha declarado que no comprende la forma en que ha bloqueado la formación de Gobierno. “El problema no han sido nunca los contenidos. El problema de Iglesias ha sido el sillón”, sentenció. Cuando parecía que iba a alcanzarse una solución, tenía lugar en Valencia un acuerdo alcanzado por Podemos y Compromís conocido como ‘El acuerdo de El Pardo’ con la finalidad de alcanzar una formación de izquierdas sin la presencia de Ciudadanos.
El líder socialista ha confesado que ayer mismo realizaron una contraoferta a ambos partidos en la que el PSOE validaba veintisiete de los treinta puntos expuestos, sin dejar de lado a Albert Rivera. Sin embargo, Pedro Sánchez ha confesado que, mientras que Compromís no dio un ‘no’ rotundo, Pablo Iglesias lo rechazó. En la misma línea, se ha atrevido a confesar que las últimas decisiones tomadas por el líder de Podemos no están representando a sus votantes, y que el ala moderada del partido estaría en manos de Íñigo Errejón.
Por el contrario, las palabras dirigidas hacia Mariano Rajoy fueron de arrepentimiento. Tras declarar meses anteriores que el político popular era un político indecente ha reconocido que: “Podía haber utilizado otra expresión para definir a Rajoy. Yo también he aprendido de estas elecciones”. Asimismo, Sánchez comprende que Rajoy se haya desmarcado en estos meses de estos debates progresistas.
En definitiva, tras el desacuerdo pleno de todas las formaciones políticas, España tendrá que debatir de nuevo la investidura de gobierno en algo más de un mes. Asimismo, tal y como declaraba el líder del PSOE, tras los resultados será necesario alcanzar un pacto político para reconducir el futuro del país de la mejor manera posible.