Las marcas más innovadoras se adelantan a la competencia gracias a la figura del coolhunter o cazador de tendencias. Una figura cada día más cotizada que se encarga de identificar, precisar y cazar las que serán las futuras corrientes de moda en varios sectores como el diseño, la moda, la arquitectura, la comunicación, la fotografía, el interiorismo o la tecnología. Pero uno de los más importantes es el sector del mundo de la moda donde estas figuras tienen una influencia especial.
El coolhunting es un término que viene del sector del marketing y del ámbito de la moda. En castellano coolhunter sería como una persona que realiza la tarea de “cazador de tendencias”.
En palabras de la psicóloga especializada en Investigación de Tendencias, CEO de Coolhunting Community, y responsable en Madrid de la Asociación Española de Coolhunting, Lourdes Rodríguez, “el coolhunting como concepto se popularizó a finales de los 90 a raíz de un artículo publicado por Malcom Gladwell en el periódico The Newyorker. Aunque como tal el coolhunter o cazador de tendencias es una figura que ha existido siempre, aunque no se utilizara ese nombre, en todos los sectores podemos encontrar personas que se han adelantado a su época o a las modas, gracias a la observación atenta de los cambios que se producían en su alrededor”.
Lourdes Rodríguez / Foto: Asociación Española de Coolhunting
Asimismo, las personas que realizan la caza de tendencias son denominadas también como trendsetters o influenciadores, y son las encargadas de asistir a las empresas que les contraten, las cuales suelen ser especialmente del sector de la moda, pero no todas.
Camino a descubrir las nuevas modas
El cazador está permanentemente viajando y observando todo lo que hay a su alrededor. Tal y como comenta a Infoactualidad, la autora especializada en diseño y tendencias autora del libro Coolhunting digital, a la caza de las últimas tendencias, Anna María López López, “un coolhunter nunca deja de observar lo que le rodea y suele ir equipado a todas horas con herramientas para registrar datos, como una cámara, tablet, smartphone. Y es que se pueden cazar tendencias en todas partes, aunque hay ciertos centros neurálgicos donde se cuecen las tendencias y ciertas personas o trendsetters capaces de innovar e influenciar a las masas a quienes es recomendable tener bajo seguimiento”.
Anna Maria López López / Foto: Stefan Lindblad Blog
Las predicciones triunfan
La psicóloga Rodríguez comenta a este periódico que “ dos de los aspectos más importantes son: ver si ésta tendencia se repite de manera transversal en otros sectores, es decir, si hablamos de la tendencia de la preocupación por el medio ambiente, por poner un ejemplo, podemos encontrar indicios en diferentes ámbitos: tanto en vinos ecológicos (gastronomía), como en materiales de construcción sostenibles (arquitectura)”. Y otro factor determinante que añade la CEO es que “esos indicios encontrados estén alineados con las macrotendencias imperantes, es decir, que tengan sentido y conexión con aspectos de los contextos analizados como la cultura, la economía o la política”.
En el ámbito de las tendencias, son ciclos, y en estos ciclos la sociedad es la que manda. Hay modas que se rescatan, otras nuevas que se generan de la mezcla de varios momentos en la historia o simplemente tendencias que se crean.
Además, el núcleo de estas, que en este caso son las ciudades, están en continuo cambio y entre las que más inspiran se encuentran Londres, París, Nueva York o Tokio. La causa es la gran variedad de gente, estilos, la amplitud de las ciudades, en definitiva, la clave está en que cada una de ellas es diferente, y por consecuencia, un hervidero de tendencias. Aunque tal y como informa “las ciudades generadoras de tendencias van variando con el paso de los años (Nueva York, París, Londres, Amsterdam, Los Ángeles) aunque por ejemplo Tokio siempre ha estado entre las primeras de la lista. Últimamente también está despuntando Tel Aviv”.
Actualmente, como indica las tendencias que están al mando de muchos sectores son: “la personalización extrema es una tendencia en alza, y que los productos personalizados a gusto del cliente pueden ser tremendamente cool. La tendencia DIY (Do it yourself / Házlo tú mismo) también está adquiriendo un mayor protagonismo al igual que la artesanía o el movimiento CRAFT, basado en la creación a mano, se está apoderando de sectores como la moda o la decoración. Dotar de personalidad propia y autenticidad a los productos es la tendencia que imperará en los próximos años”. Además, como señala la especialista “de una apuesta por realizar dichos productos, con nuevos materiales más ecológicos y respetuosos con el medio ambiente”, como la nueva tendencia a la moda ecológica.
Las tendencias del 2016
Según explica la directiva de las tres marcas más importantes de la moda a nivel mundial, Louis Vuitton, Gucci y Miu Miu del grupo Prada, María Luisa Funes, este año que acaba de comenzar, la moda tendrá variedad, un toque retro y feminidad. El minimalismo se queda atrás con ropa de gasa con pliegues y plisados, adornos, lazos y volantes, y uno de los colores predominantes será el rosa
De esta manera se observa como la predicción de tendencias influye sobre toda la sociedad, abarca muchos ámbitos, y aunque no todo el mundo lo acepte, los coolhunters influyen también en los hábitos de todo el mundo. Una profesión con una larga visión de futuro.
Como dice el diseñador italiano Elio Fiorucci, "ya no existe la moda, sino que existen las modas. El hombre culturalmente rico necesita la diversidad", un reflejo de lo que se vive en cada nueva temporada.