Atocha y Chamartín se encuentran a un paso de estar más cerca con la puesta en servicio del nuevo túnel por el que transcurrirá el AVE. Para garantizar la seguridad de los viajeros, la nueva infraestructura cuenta con medios de tecnología punta. El nuevo túnel conectará el norte con el sur peninsular, acortando la distancia y el tiempo actual.
Se cumplen 24 años desde que el primer tren de alta velocidad AVE se pusiera en marcha en España. Un día después de la inauguración de la Exposición Universal de Sevilla, el 21 de abril de 1992 fue el momento en el que por primera vez un tren AVE unía Madrid con la capital hispalense. Ese acontecimiento marcaría un antes y un después en la historia de los ferrocarriles españoles.
Desde entonces el gobierno de la nación apostaría por la construcción de las lineas de alta velocidad, LAV, y por la remodelación de la flota de trenes. Actualmente, España es el primer país de Europa en kilómetros de líneas LAV y el segundo del mundo detrás de China. Además, cuenta con una de las flotas de trenes mas jóvenes del mundo.
El tercer túnel entre Atocha y Chamartín
La red ferroviaria española está compuesta en su gran mayoría por dos tipos de ancho de vía, el ibérico con 1.668 mm de anchura y el internacional con 1.435 mm. Los trenes de alta velocidad AVE circulan por las líneas de ancho internacional, mientras que los trenes convencionales como el cercanías circulan por las lineas de ancho ibérico.
La razón para la construcción de un tercer túnel entre las estaciones de Atocha y Chamartín es porque los dos túneles anteriores prestan servicio a trenes convencionales como el cercanías, por lo tanto su vía es de ancho ibérico. El nuevo enlace unirá las dos estaciones mediante una vía de ancho internacional, cohesionando así las líneas de alta velocidad.
El estado actual
La construcción del nuevo enlace ferroviario, que unirá las estaciones de Atocha con Chamartín, comenzó el 24 de abril de 2010 con la perforación del túnel mediante una tuneladora denominada ‘Gran Vía’. Desde el departamento de prensa del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias Adif, aseguran que “actualmente las obras en el interior del túnel se centran en la instalación de la electrificación y señalización”.
Entre Puerta de Atocha y Torrejón de Velasco se ha llevado a cabo el montaje de una segunda vía con las correspondientes tareas de electrificación y señalización. Estas nuevas vías dotarán de una mayor capacidad de entradas y salidas a los trenes AVE provenientes con destino sur o este del país. Tanto el túnel como la ampliación de vías de acceso, se encuentran en su recta final, aun así Adif no ha querido adelantar ninguna fecha de inauguración.
Mejorar la conectividad
Para Adif la puesta en marcha del túnel de alta velocidad Atocha-Chamartín, constituye una actuación clave para mejorar la conectividad de la red española de trenes de alta velocidad. Este túnel, que unirá las dos principales estaciones de ferrocarriles madrileñas, articulará y dará sentido a todas las LAV españolas. De esta forma, un pasajero podrá viajar en un tren AVE desde León hasta Málaga, sin la necesidad de parar en Chamartín para hacer un transbordo en Atocha.
El trazado del nuevo túnel
El túnel tiene una longitud de 7,3 kilómetros, de los que 6,8 kilómetros fueron perforados mediante tuneladora. En el tramo inicial, en el cruce de la calle Mateo Inurria, se ejecutó un falso túnel de 110 m de longitud, por el cual pasó la tuneladora al inicio de su recorrido.
El trazado continúa en sentido Norte-Sur hasta la plaza de la República Argentina, desde donde sigue el eje longitudinal de las calles Serrano y Alfonso XII. Continúa su curso atravesando la zona del Jardín Botánico hasta finalizar en la glorieta del Emperador Carlos V, frente a la antigua marquesina de Puerta de Atocha.
El enlace ferroviario transcurre por debajo de ocho líneas de metro, paralelo a los dos túneles que actualmente conectan las estaciones de Atocha y Chamartín, ambos de ancho ibérico. En las proximidades de Sol y Recoletos, el nuevo túnel pasa por debajo de los dos anteriores. Solo pasa por encima de una linea del metropolitano madrileño, la nueve, a la altura de la calle Mateo Inurria.
La seguridad como pilar fundamental
Para Adif la seguridad ha sido en todo momento uno de los pilares principales del proyecto, por ello antes de comenzar las obras se hicieron estudios del terreno y de los edificios próximos al trazado del tubo. Desde el departamento de prensa de Adif explican que también se realizaron controles periódicos de auscultación del terreno, tanto en superficie como en profundidad a lo largo de todo el túnel.
El interior del tubo cuenta con sus respectivos andenes de evacuación, equipados con barandilla e iluminación de bajo consumo. Está dotado de numerosos equipamientos e instalaciones de seguridad de primer orden. El nuevo enlace ferroviario cuenta con cuatro centros de transformación, tres pozos de ventilación, cinco pozos de bombeo y diez salidas de emergencias.
En cuanto a las salidas de emergencias, tres de ellas se encuentran en la calle Serrano, se conectan con el exterior a través de aparcamientos. El resto están localizadas en Garganta de los Montes, Atocha, Espalter, República Argentina, Concha Espina, Alberto Alcocer y Hiedra, junto a la estación de Chamartín, señalan desde Adif.
El AVE ha marcado un antes y un después en lo que a conexión y vertebración de territorios se refiere. A pesar de los continuos retrasos en la finalización y puesta en servicio del nuevo túnel, son numerosos los usuarios del AVE que esperan impacientes la apertura de esta nueva infraestructura. Mientras tanto, norte y sur contemplan esta obra realizada en Madrid, que tras su culminación, repercutirá en todo el territorio español.