Conde fue elegido tras superar el examen al que se sometió el jueves. El que hasta ahora era concejal de Medio Ambiente, Servicios de la Ciudad e Innovación Tecnológica fue sometido a una batería de preguntas por los medios de comunicación y miembros del partido, moderados por la vicesecretaria Gádor Ongil. Los otros miembros fueron Bartolomé González, alcalde de Alcalá de Henares; Fernando Martínez Vidal, concejal de Madrid y Manuel Cabrera presidente de Nuevas Generaciones en Valdemoro.
El nuevo alcalde que reside en la localidad desde hace 8 años afirmó que iba a luchar para superar el golpe que ha sufrido la ciudad, ya que “Valdemoro es mucho más que la Operación Púnica”. Conde es diplomado en Relaciones Laborales y ha trabajado como asesor y adjunto a la gerencia en el distrito de la Latina, y como jefe de la unidad de Cultura del distrito de Usera, antes de acceder al puesto de concejal en Valdemoro. Además afirmó: “como todos los estudiantes, mientras estudiaba, he trabajado de muchas cosas, de albañil o camarero en un Burger King”.
En cuanto a las preguntas relacionadas con la corrupción, el nuevo alcalde se manifestó claro: “Me considero una persona honrada”. Igualmente, respondió que no tiene dinero en otros países respondió, “ni en Suiza, ni en ningún otro paraíso fiscal”. Garantizaba así, no haber recibido ningún regalo por su labor como concejal: “Al principio de la legislatura me regalaron una plantita de un vivero de la localidad que dejé en la concejalía. Entiendo que no tienen por qué regalarme nada porque estoy suficientemente pagado”. Su sueldo como concejal era de unos 1950 euros según indicó.
Tal y como dice la legislación, Conde, ahora como alcalde y anteriormente como concejal, tuvo que hacer público su patrimonio, formado por el piso donde vive, una plaza de garaje, un coche y un motocicleta. Además, su mujer tiene otro piso de cuando era soltera y su coche. Resaltó su vehículo, el cual afirmó que seguirá siendo su medio de transporte para ir al trabajo, ya que a diferencia del anterior alcalde él renuncia a tener un coche oficial.
A pesar de ser el número 12 en la lista de la ciudad, David Conde ha llegado a la alcaldía tras la denuncia del resto de aspirantes. Ante esto declaró: “me sentí en la obligación de dar un paso al frente”, añadiendo que sigue creyendo en el partido: “Sigo creyendo exactamente en las mismas ideas que cuando me afilié al Partido Popular cuando tenía 18 años y las sigo defendiendo igual, otra cosa es que haya habido personas que no hayan sido merecedoras de ostentar estas siglas”.
“Mi relación con Granados era únicamente laboral”
Con respecto a su relación con Granados, Conde incidía en que se reducía a una mera “relación laboral”. Insistía, “Conozco a Francisco Granados porque soy miembro del comité ejecutivo de Valdemoro al ser concejal. Hace tres años que le conozco porque él era el presidente del partido en Valdemoro, tenía una relación estrictamente de partido”, añadía también: “estuvo incluso en mi boda porque vino con el presidente, vinieron todos los concejales”. Incurría sobre todo en que el no es de Valdemoro, y eso limitaba su relación con muchos de los miembros del partido, ya que los que sí lo son se conocen desde hace más tiempo. Añadió que tampoco tiene, ni ha tenido relación con las empresas implicadas en la Operación Púnica. Asimismo, agregaba que si hubiese tenido constancia de la trama, no habría dudado en decirlo. Su primera medida como alcalde será llevar a cabo una comisión de investigación y una mesa de transparencia.
En el examen a candidato, práctica novedosa en el PP, Infoactualidad le preguntó lo que necesita Valdemoro después del escándalo y la garantía que les ofrecerá a los ciudadanos para que no se vuelva a repetir, a lo que Conde respondió que tanto el equipo de Gobierno como él no han sido detenidos. “Confío en la labor de mi equipo. En este aspecto que sea la persona idónea o no, el tiempo lo va a decir. Yo desde luego voy a poner todo de mi parte”, finalizó.