Los protagonistas de Ghost In The Shell, adaptación de Hollywood del manga de Shirow Masanume, de 1989, son japoneses, pero los actores que la protagonizarán no lo serán, como el personaje protagonista interpretado por Scarlett Johansson, a quien se cree que se le dotaría con rasgos asiáticos con tecnología CGI, una idea que fue "inmediatamente rechazada" por las productoras, según Europa Press. Por este motivo, los fans han alzado la voz para denunciar un nuevo caso de whitewashing (“lavar de blanco” u occidentalizar) en Hollywood, a través de la web Screen Crush.
Todas las acusaciones que proceden de la web, han sido negadas por las productoras. En un principio, se habrían llevado a cabo pruebas de caracterización asiática a un actor que se encuentra "al fondo" en una escena, pero nunca sobre Johansson ni otro personaje principal. "Hicimos una prueba en una escena concreta para un actor secundario que ha sido finalmente descartada. Ninguna prueba tuvo lugar sobre el personaje de Scarlett y no tenemos planeado hacerla", ha informado Paramount a Screen Crush. En este sentido, estas pruebas de imagen se han llevado a cabo por la compañía Lola VFX, quien también ha realizado los efectos visuales de Exodus: Dioses y Reyes, otro film duramente criticado por escoger actores blancos para roles de origen egipcio y del medio oriente.
Una de las declaraciones que más se ha hecho eco al respecto ha sido la de la actriz Ming-Na Wen (Mulan, Street Fighter), que forma parte junto a Johansson del universo cinematográfico de Marvel. Wen respondió así al tweet con la primera imagen de Scarlett en el papel: “No tengo nada en contra de Scarlett Johansson. De hecho, soy una gran fan. Pero estoy totalmente en contra de la occidentalización de roles asiáticos".
La actriz tiene fama de protagonizar a menudo disputas con la prensa por diversas polémicas, relacionadas con su aspecto y la potenciación de la vertiente sexual que se hace de ella. En este caso, aunque a ojos de los fans la culpa no recae sobre su personaje, es su presencia en la película la que está incomodando a la gente, según las críticas de la web. Los seguidores se preguntan por qué una actriz blanca ha sido la elegida para protagonizar al personaje de Motoko Kusanagi, de origen japonés, y acusan a Hollywood de volver a caer en el mismo error.