En esta exposición, Marcel Dzama une la pintura, el lápiz, y el pergamino, en un total de 22 cuadros a los que se suman tres marionetas, cuatro cabezas de bufones hechas con papel maché, y un vídeo, “Une Danse Des Buffons” (Una danza de bufones).
El título de esta exposición, que puede ser traducido como “Un bromista hizo este mundo”, hace clara referencia al libro de Lewis Hyde, “Trickster Makes This World: Mischief, Myth and Art”, a la par que alude a los bufones de las cortes medievales, del teatro clásico y de una baraja de cartas.
En esta muestra de sus últimas ideas, Dzama hace gala de un humor un tanto peculiar que pretende burlarse de la sociedad borrando todo rastro de seriedad. Para esto, coloca cabezas de animales sobre cuerpos humanos, viste a sus protagonistas de uniformes y trajes, en su mayor parte monos azules con punto blancos, algo muy característico de la obra de Dzama, y refleja todo tipo de relaciones sexuales.
Dzama también homenajea, con su propio estilo, a artistas inspiradores de su obra como David Cronenberg o Francisco de Goya y sus “caprichos”, este último fue el primer artista en reflejar imágenes de monstruos y figuras poco habituales sin motivo definido.
La cinta es una evolución en la obra de Dzama al invitar al espectador a ver una historia de amor dadaísta protagonizada por el Étant Donnés de Duchamp y, unida al resto de motivos visuales, sirve para representar al mundo de locos que le rodea cargado de violencia, muerte, corrupción, falso amor.
En definitiva, un lugar perturbador y mágico repleto de fantasía y surrealismo que conmoverá y divertirá al espectador mientras se pregunta, ¿qué estoy viendo?
Esta exposición se puede disfrutar hasta el 4 de enero de 2014 en la galería de arte Helga de Alvear de Madrid.