El primer ministro italiano, Matteo Renzi, y la canciller alemana, Angela Merkel, han expresado este jueves, después de reunirse en Roma, su rechazo a los planes de Austria de construir una valla en la frontera con Italia, para prevenir la entrada de inmigrantes. Los dos líderes también estuvieron de acuerdo en que la Unión Europea necesita una política seria en materia migratoria ya que si no se crea una política migratoria común, viejos fantasmas nacionalistas volverían a despertar.
No es ninguna novedad que la política italiana es una de las más plurales aunque también más inestables de todo el panorama europeo. Este domingo, se celebraron las elecciones regionales en siete de las veinte regiones que conforman el país transalpino, marcadas por una gran abstención y por la victoria del actual primer ministro Renzi a pesar de que su formación, el Partido Democrático, haya perdido el 16% de los votos.
Pese a que las encuestas ya daban el triunfo al PD, el resultado electoral italiano ha dejado sorpresas. Sobre todo por la contundente victoria del partido del gobierno ante el Movimiento 5 estrellas en un duelo que se esperaba mucho más disputado según los sondeos. La derecha italiana está fragmentada tras la disolución del PdL, el partido de Berlusconi que ganó las últimas europeas.