Cristina Manzano, directora de Esglobal, presentó y moderó la conferencia sobre las reformas de Michelle Bachelet en la sala Cervantes de La Casa de América. Empezó su intervención con una afirmación rotunda: “Chile nos fascina porque es un modelo en la región”.
Michelle Bachelet es la primera mujer reelecta en Chile. Según El País, la presidenta ha declarado que su mayor reto es “hacer una reforma educacional que permita dar oportunidades a todos”. El partido Nueva Mayoría de Bachelet consiguió en las legislativas del pasado 17 de noviembre 68 diputados (sobre un total de 120) y 21 senadores (sobre 38), lo que significa un resultado suficiente para enfrentarse a las reformas prometidas, aunque no haya sido un resultado holgado.
La licenciada en sociología y profesora de la Universidad Complutense de Madrid, Leticia Ruiz Rodríguez, presentaba los cuatro retos principales de este mandato. El primero, conseguir que funcione la nueva coalición de Nueva Mayoría ya que, ideológicamente, son diferentes: las reformas son difusas y la coalición es personalista. Como segundo reto, debe intentar mantener el apoyo del ciudadano, ya que necesitan mejoras inmediatas. El tercer reto sería realizar las reformas prometidas: reforma educativa para conseguir una educación de calidad y gratuita y la reforma tributaria. “Éstas serían las reformas más fáciles, pero luego existen otras más complejas como la elaboración de una nueva Constitución”, afirma. El cuarto y último reto es convivir con los nuevos actores sociales como el movimiento estudiantil.
Altos índices de desigualdad
Por su parte, Fernando Gualdoni, jefe de la sección de internacional de El País, afirmó que “se necesita una reforma muy grande con un coste muy alto” y añadió un dato relevante: tres cuartas partes del PIB son para un 1% de la población, lo que hace entender que Chile esté entre los quince países más desiguales del mundo. Sobre esta desigualdad, Fernando Gualdoni añadió que es un país que crea mucha riqueza pero se la quedan muy pocos.
Con respecto a la economía del país, la profesora Ruiz y Gualdoni coincidían en pensar que no habrá grandes cambios macroeconómicos sino que habrá continuidad. El periodista ve factible que aumenten las oportunidades de negocio con Argentina y con Brasil ya que las relaciones internacionales serán más naturales con Bachelet.
Uno de los grandes objetivos es lograr que el pueblo se identifique con los políticos ya que en las últimas elecciones la abstención fue de casi el 60%. Los chilenos sienten que es el momento y empiezan a creer en el futuro porque, como señalaba la profesora Ruiz Rodríguez, “la oferta partidista se está fragmentando y los movimientos estudiantiles comienzan a entrar en el sistema”.
También se hizo hincapié en las buenas relaciones que mantienen España y Chile. Como señalaba Gualdoni: “Es un buen síntoma que el Príncipe Felipe haya acudido a la toma de posesión de Bachelet”.
Finalmente, un joven chileno que acudió a la conferencia afirmó no creer que un gobierno de coalición pueda llevar a cabo grandes medidas. “Hay un alto porcentaje de población chilena que ya no cree en el sistema institucional”, concluyó.