El proyecto Social Erasmus comenzó hace ochos años en Polonia con el objetivo de que los estudiantes internacionales participen y se involucren en su comunidad a través de diferentes acciones sociales. El éxito de Social Erasmus hizo que se extendiese a otros países, convirtiéndose en 2010 en un proyecto de nivel internacional con un lema contundente: “Leave your mark” (Deja tu marca).
Social Erasmus tiene tres áreas principales de acción: educación, caridad y medio ambiente, que se diversifican en variadas actividades. En primer lugar, en el área de educación, se encuentra el proyecto más exitoso: Erasmus in Schools, que tiene como objetivo promover la movilidad internacional de los más pequeños, eliminar estereotipos y barreras ideológicas. Se organizan visitas a escuelas primarias y secundarias donde se hacen presentaciones de los países de los que provienen los estudiantes erasmus, el aprendizaje de idiomas y el fomento de la movilidad y el deporte.
En segundo lugar, se encuentra Erasmus Forest, que promueve el cuidado del medio ambiente, con visitas a bosques donde los voluntarios plantan sus propios árboles. Por otro lado se encuentra Erasmus Hall, que tiene el objetivo de mejorar las condiciones de las instituciones sociales que cuidan de los niños. “Renovamos salas de espera, habitaciones de juegos en hospitales, orfanatos y guarderías”, asegura Paulina Sikorska, coordinadora de Social Erasmus en ESN UAM de Poznan.
Y por último, un proyecto destacado y muy novedoso es Erasmus Date Auction, que consiste donar dinero para tener una cita con una serie de chicos o chicas. Esta curiosa manera de conocer gente nueva ha sido creado para “recaudar dinero para organizaciones de caridad y para gente que lo necesita”, asegura Sikorska. Además, esta iniciativa “atrae no solo a estudiantes erasmus sino también a estudiantes de la ciudad”, añade la coordinadora.
La labor del voluntariado
Son los propios voluntarios los que han conseguido que se lleven a cabo cada uno de los proyectos mencionados. Es el caso de la joven italiana Augusta Delle Vedove, quien ha participado en el proyecto social de Erasmus in Schools. Comenzó acudiendo a un orfanato el día de Halloween para celebrarlo con los más pequeños, bailando y pintando calabazas. Tanto le gustó la experiencia que decidió repetir, esta vez acudiendo al hospital para pasar la tarde con los niños que luchan cada día contra el cáncer. Vedove quedó encantada con ambas experiencias y asegura que “incluso si crees que no eres bueno con los niños debes probar una experiencia como esta”. La estudiante italiana resalta que este tipo de actividades que organiza Social Erasmus enseña una importante lección para el propio voluntario: “Con simples juegos y una sonrisa puedes hacer muy feliz a todos aquellos niños que no han tenido tanta suerte como nosotros”. Es por ello que recomienda esta experiencia a cualquier estudiante, ya que lo ve necesario para completar el propio Erasmus.
Cláudia Agarao también se encuentra disfrutando de la experiencia Erasmus en Polonia y del proyecto Social Erasmus. Ella también ha participado en Erasmus in School, aunque en actividades diferentes a Delle Vedove. En este caso, la estudiante portuguesa acudió a una escuela para hablar sobre su país, mostrándole videos, imágenes de Portugal y realizando juegos para que aprendiesen algunas palabras en portugués. Para Agarao esta experiencia ha sido altamente gratificante, ya que le ha dado la oportunidad de saber más sobre las escuelas polacas y además “ayudas a otras personas a improvisar su inglés y sus conocimientos sobre otros países”, destaca la joven.
Y es que la realización de este tipo de acciones solidarias no solo beneficia a los niños o al medio ambiente, sino también a los propios voluntarios que hacen posible que se lleven a cabo. Así mismo lo cree Paulina Sikorska, quien asegura que “con este tipo de voluntariado los estudiantes aprenden muchísimo de la cultura local y sobre la ayuda altruista”. Es por ello por lo que anima a todos a probar esta experiencia para completar la experiencia Erasmus.