Tras el acuerdo entre Estados Unidos y Cuba se han liberado los movimientos migratorios entre dichos países, provocando que una gran oleada de personas de origen cubano y paralizadas en Panamá, debido al cierre de las fronteras del país costarricense, puedan desplazarse hasta la ciudad de México (EEUU) finalmente.
Panamá ha permitido que se produzcan 4.000 desplazamientos hacia la Ciudad de México, con la premisa de que los billetes sean costeados por los ciudadanos, quienes se han apilado esta mañana en bancos en espera del dinero transferido por sus familiares. Además, en este día, han llegado a la ciudad 166 hombres, 71 mujeres y un menor de edad, a quienes se les ha facilitado un documento provisional que permite una estancia de 20 días en el país, y de ser acogidos por la Ley de Ajuste Cubano (vigente desde 1966) otorgándoles unos privilegios y residencia.
A pesar de que Costa Rica quisiera establecer un acuerdo para que su territorio se convirtiera en un corredor humanitario de paso hacia EEUU (ya que entre los países que tienen que atravesar los ciudadanos sudamericanos para lograr llegar a la frontera estadounidense, se encuentra Costa Rica), no se pudo llevar a cabo debido a la negativa de Nicaragua. Aún así, tras varios intentos fallidos, el SICA (el Sistema de Integración Centroamericana) señaló la opción de ayudar a los cubanos parados en estos países sacándolos por vía aérea o marítima del territorio.
Alejandro Ruiz, fundador de la ONG “Cubanos en Libertad”, ha declarado haber tenido contacto con las personas que se encontraban paralizadas en Panamá, y ha asegurado que los migrantes han podido atravesar sin ningún impedimento la frontera estadounidense, llegando con éxito a la ciudad destino de Juárez (México).