El pasado sábado ocurrió una nueva agresión a un conductor de la EMT. Ya son 209 agresiones las que han tenido que sufrir los conductores de esta red de transportes de Madrid en los últimos dos años (2014-2015). El último suceso que aconteció fue la agresión a Miguel Ángel, un conductor de 34 años que mientras conducía en la línea madrileña de Felipe II-Manoteras, salió en defensa de dos mujeres que se encontraban dentro del autobús y que estaban siendo increpadas por otros cinco pasajeros, los cuales, según fuentes recientes policiales, estaban consumiendo cocaína dentro del autobús.
Los jóvenes, que tienen entre 20 y 23 años, utilizaron el DNI para prepararse las rallas de cocaína, hecho que influyó positivamente para la investigación policial, pues en su estado de embriaguez, uno de ellos olvidó el documento de identidad dentro del autobús, y facilitó la detención de tres de los jóvenes. Aún no se ha identificado al cuarto agresor, y se sospecha que puede haber una quinta, una chica que acompañaba a los jóvenes, pero que por el momento, no está esclarecida su participación en el asunto.
El conductor, Miguel Ángel, paró el vehículo en la calle Arturo Soria (Madrid) y salió en defensa de las dos pasajeras del autobús. Este, pidió respeto y educación a los jóvenes, ya que además, estaban provocando un fuerte jaleo en el vehículo público. Los atacantes respondieron mal a sus quejas y taparon la cabeza del conductor con un jersey mientras le propinaban varios golpes. El conductor fue hospitalizado con contusiones en la cabeza, hombro y espalda, además de sufrir un gran shock emocional, declara la familia.
El resto de conductores de la EMT, se reunieron el pasado lunes en las inmediaciones de la empresa madrileña para mostrar su apoyo y queja social hacia los abusos y ataques que sufren diariamente. Así mismo, los sindicatos pidieron más seguridad. Mientras tanto, los jóvenes se encuentran en espera del proceso judicial que ya se ha iniciado.