La Real Federación Española de Futbol (RFEF) ha celebrado esta mañana, en la Ciudad del Futbol de Las Rozas, el sorteo de copa donde se han decidido los emparejamientos en octavos de final, que se jugarán los días 6 y 13 de enero del año que viene. Ante la ausencia del Madrid, descalificado por alineación indebida, los enfrentamientos más emocionantes tendrán lugar en Madrid y Sevilla. La ciudad condal vivirá tres duelos entre culés y periquitos ya que ambos equipos se enfrentarán en Liga el 2 de enero. El equipo de Luis Enrique jugará la vuelta en Cornellá-El Prat.
La capital andaluza vestirá sus mejores galas para volver a ver un derbi copero. Betis y Sevilla también jugarán tres veces en menos de un mes, la primera el próximo sábado. La última vez que ambos conjuntos se midieron por una plaza en esta competición, durante la temporada 2006/2007, será lamentablemente recordado por el botellazo que sufrió Juande Ramos, por aquel entonces técnico sevillista. Hoy, las aguas de Nervión bajan más calmadas que hace nueve años. El primero en hablar del derbi ha sido Pepe Mel. El entrenador bético ha declarado en rueda de prensa que “a 24 horas de un partido tan importante, la copa no nos preocupa”.
El tercer derby, este más descafeinado, enfrentará al Rayo Vallecano y Atlético de Madrid. El primer encuentro se celebrará en Vallecas mientras que el segundo se vivirá en la ribera del Manzanares. Fuera de los enfrentamientos locales, el sorteo ha deparado otro choque entre equipos de primera, el Valencia-Granada.
Los equipos de la división de plata del futbol español también tendrán representación en esta ronda. El Mirandés se enfrentará al Deportivo de la Coruña, aunque su entrenador, Carlos Terrazas, manifestaba que para él “lo que manda es el partido de Llagostera” que los “rojillos” jugarán este fin de semana. El Cádiz, equipo que jugó contra el Real Madrid en dieciseisavos, recibirá al Celta y Las Palmas viajarán hasta el País Vasco para jugar contra el Eibar.