Durante tres años, tanto el Rey Don Juan Calos, como el actual, Felipe VI, han pedido a la infanta Cristina que renunciara a su título nobiliario como Duquesa de Palma por su implicación en la trama de corrupción del caso Nóos. Finalmente, Zarzuela ha decidido retirárselo. En un decreto publicado en el Boletín Oficial del Estado el pasado jueves 11 de junio, se comunica esta decisión. El abogado de la infanta ha alegado que fue su defendida la que mandó una carta renunciando al título, pero la Casa Real lo desmiente.
Desde Jefatura del Estado se ha promulgado mediante el boletín oficial la siguiente decisión: “Revocar la atribución a Su Alteza Real la Infanta Doña Cristina de la facultad de usar el título de Duquesa de Palma de Mallorca, que le fue conferida mediante Real Decreto 1502/1997, de 26 de septiembre”, firmada por el mismo presidente del Gobierno.
Esta se une a las medidas que está tomando la Casa Real como parte del plan de transparencia y de regeneración en esta institución. Decisiones tomadas por la mala prensa que está teniendo en los últimos años la Familia Real, debido a episodios como las cazas de elefantes en África, protagonizadas por Don Juan Carlos, su presencia en la prensa rosa por presunta mala relación con la Reina, o la vinculación de Iñaki Urdangarín en el caso Nóos, con la posterior imputación de la infanta Cristina. La decisión de retirarle el título a la hermana del rey se une a otras medidas como la publicación de las cuentas de la Casa Real en la página web oficial de la Zarzuela.
Miquel Roca i Junyent, el abogado de la infanta, asegura que no fue retirada de su título, si no que fue la propia infanta la que decidió renunciar a él. Pero fuentes cercanas a la Casa del Rey lo desmienten, asegurando que la carta de renuncia enviada por la infanta se recibió después de que Felipe VI hiciera oficial el decreto.
La Casa Real quiere limpiar su imagen, y Felipe VI se suma a la ola regeneracionista e intenta salvar la monarquía en España, adaptándose a un nuevo tiempo en el que la ciudadanía pide responsabilidad y ejemplaridad a los cargos públicos.