La embarcación, con 458 personas a bordo, ha naufragado en el río más largo de China, el Yangtsé, en la noche de este lunes. Trece personas han sido rescatadas por ahora, y se han hallado cinco cadáveres. La embarcación ha sufrido el accidente mientras realizaba un crucero turístico entre las ciudades de Nankín, al este del país, y Chongqing, al oeste. Por el momento hay 400 personas desaparecidas.

Los pasajeros del barco “Estrella de Oriente” eran todos chinos. A bordo había 47 miembros de tripulación, cinco guías de viaje y 406 turistas, la gran mayoría de avanzada edad, entre 50 y 80 años, que participaban en una excursión turística contratada a través de una agencia en Shanghái.

El buque zozobró en escasos minutos, sin emitir ninguna señal de socorro, a causa de un temporal en la zona. La emisora de televisión CCTV ha informado que siete personas consiguieron llegar a nado hasta la orilla y alertar a la policía. Entre los supervivientes están el piloto y el capitán del transbordador. El periódico China Daily ha indicado que ambos se encuentran bajo custodia policial.

Los equipos de rescate que se han desplazado al lugar de los hechos, entre los que se encuentran 2.100 militares y policías, así como un millar de civiles, afirman a la agencia oficial Xinhua que se escuchan voces y ruidos dentro del barco. Los trabajos de los voluntarios y de las 150 embarcaciones que se encuentran en torno a la nave siniestrada están viendo dificultadas sus labores de salvamento por la lluvia y la mala visibilidad de la zona.

El presidente chino Xi Jinping ha ordenado que se destinen todos los recursos necesarios para el rescate de las personas. Por otro lado, el primer ministro Li Keqiang se ha desplazado hasta la zona para coordinar la búsqueda de los pasajeros y ha pedido que se destinen “todos los esfuerzos” a las tareas de rescate.

Entre los motivos del hundimiento, se descarta totalmente la posibilidad de exceso de pasajeros así como la escasez de chalecos salvavidas, destacando el temporal como causa principal. La agencia de viajes organizadora mantiene sus puertas cerradas con un cartel escrito a mano indicando que se encuentran en el lugar de lo sucedido.

El accidente es el peor ocurrido en el río Yangtsé desde enero de este año, cuando un remolcador que se encontraba haciendo pruebas naufragó con 25 pasajeros a bordo y perdieron la vida 22 personas.