La Comisión Estatal contra la Violencia el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte se ha iniciado esta mañana, alrededor de las 13.00 horas en el Consejo Superior de Deportes (CSD). La reunión tiene lugar tras la sonorosa pitada al himno español en la final de la Copa del Rey. El partido se celebró el sábado y enfrentó al Athletic Club y al FC Barcelona en el Camp Nou.
Según el Gobierno, la comisión pretende denunciar las "actuaciones inconvenientes y, en su caso, proponer las sanciones que fueran procedentes, en aplicación de la vigente legislación”. Asimismo, condena los ataques contra los símbolos de la democracia y los españoles y considera que "cualquier muestra o manifestación de intolerancia es siempre reprochable". "La intolerancia de algunos no debe poner en riesgo la convivencia de todos", ha sentenciado.
El Ejecutivo sostiene también que las cuestiones ideológicas o políticas no deben interferir el desarrollo normal de los acontecimientos sociales, culturales y deportivos. “Aprovechar un encuentro de fútbol para escenificar una protesta de carácter político es una falta de respeto para este deporte, para el conjunto de los aficionados y para todos los españoles, que tienen derecho a disfrutar de este partido como lo que es, un espectáculo deportivo”, añadió.
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha afirmado que considera absurdo que se haya citado la Comisión y ha pedido al Gobierno que reconsidere la medida. También ha declarado que la pitada hay que situar la pitada en un contexto normal para no hacer el ridículo.