La madre fue detenida el pasado lunes 3 de diciembre por el Cuerpo Nacional de Policía, y esta mañana ha pasado a disposición judicial en la Sala de Instrucción número 3 de la capital aragonesa. El juez se hará cargo de las diligencias pertinentes, declaradas como secretas hasta el momento.

El pasado 21 de noviembre se iniciaron las investigaciones cuando la mujer, junto a su pareja, llevó a su hija de tres meses de vida a un Centro de Salud de Urgencias. El bebé presentaba graves signos de asfixia, lo que indicaba que el fallecimiento podría haber sido provocado.

Por otro lado, y como antecedente, la Televisión de Aragón afirma que la detenida perdió a otra niña en 2011 en circunstancias parecidas, y tienen una tercera hija que, en estos momentos, está tutelada por el servicio de menores del Gobierno de Aragón. Al parecer, ésta también habría sufrido un episodio similar, aunque logró sobrevivir.

Esto sirvió para relacionar el caso actual con lo acontecido en el pasado, llevando a los investigadores a conclusiones adecuadas para la detención de la presunta parricida. La administración aragonesa ha informado a la Agencia EFE de que los servicios sociales están ya al corriente de la situación de la familia, aunque, por declararse el caso bajo secreto de sumario, no han obtenido más datos.

El Ejecutivo regional, por medio del Servicio de Salud de Aragón, en concreto el Hospital Miguel Servet; y el Instituto de Servicios Sociales, trabajan en el caso de esta familia, en coordinación con la Justicia y las Fuerzas de Seguridad del Estado. Por ahora, han retirado al matrimonio la custodia de su segunda hija, nacida en febrero de 2013.