La ciudad “minhota” de Braga se tiñe de luto al producirse esta tarde una tragedia en las calles de la ciudad. Tres chicos de unos 20 años han muerto al ser sepultados por un muro de hormigón en las inmediaciones de la Universidad del Minho, una de las más importantes de Portugal. Los estudiantes, alumnos de Ingeniería Informática cayeron atrapados por el derrumbe mientras llevaban a cabo con el resto de sus compañeros de carrera, una de las famosas novatadas que se producen durante todo el año en la ciudad.
Poco tardó en correr la voz sobre lo sucedido y a la zona fueron acercándose curiosos compañeros y amigos de los afectados que divisaron desde el cordón policial lo que iba ocurriendo durante toda la tarde. Los cuerpos de Seguridad del Estado, que desplegaron un gran dispositivo en cuanto se supo la noticia, sobre las 19:45 de la tarde hora portuguesa, dio el relevo a un grupo de estudiantes de Medicina de la propia Uminho que había intentado ayudar a los accidentados y a la vez tapar lo que ocurría para disminuir el pánico. Tras horas de movimientos se conocía la noticia de los 3 muertos con la desolación de los allí presentes.
Hasta las 11 de la noche los cuerpos sin vida de los tres estudiantes, siguieron junto al muro mientras los compañeros con más suerte viajaban a toda prisa hacia el hospital. Con la llegada de la policía judicial y los peritos, los cuerpos pudieron ser levantados y trasladados a sus lugares correspondientes. Al momento, el alcalde de la ciudad, Ricardo Rio, y su concejal de urbanismo y conexión con la Universidad, Miguel Bandeira, salieron a dar explicaciones sobre lo ocurrido. “Todavía es muy difícil esclarecer lo sucedido hasta que no se concluyera la investigación que empezará el jueves a primera hora”, anunciaba el alcalde.
De confirmarse lo que parece bastante seguro sobre las novatadas sería un golpe más para una tradición de siglos en Portugal y que está en entredicho desde hace unos años debidos a casos como el de Lisboa de hace unos meses, que acabó con unos estudiantes muertos al ahogarse en una playa de la ciudad.