×

Advertencia

JUser: :_load: No se puede cargar usuario con el ID: 892

JUser: :_load: No se puede cargar usuario con el ID: 862

Miércoles, 25 Noviembre 2015 14:08

El aniversario del final de la Gran Guerra cubre Reino Unido de amapolas

Escrito por 
Miembros de la Orden de Orange en su tradicional desfile / Foto: Pablo Lasaga Miembros de la Orden de Orange en su tradicional desfile / Foto: Pablo Lasaga

La población británica se ha volcado de lleno en el recuerdo a los caídos durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918). Londres, la capital del país, ha sido la sede de múltiples actos de conmemoración y desfiles militares.

A las 11 horas del día 11 de noviembre, cada año, Reino Unido y todos los países que componen la Commonwealth (Canadá, Australia y gran parte de las antiguas colonias británicas) guardan dos minutos de silencio en recuerdo a los caídos durante la Primera Guerra Mundial en lo que se conoce como Remembrance Day.

La fecha es significativa, ya que se trata del momento exacto en el que se firmó el Armisticio entre los distintos países implicados en la Guerra. Este conflicto bélico, el mayor visto hasta entonces en Europa, enfrentó a Inglaterra y Francia contra el Imperio alemán y sus aliados, marcando para muchos historiadores, como Eric Hobsbawn, el principio de lo que se conoce como 'siglo XX corto'.

Durante este recuerdo a los que batallaron, la familia real británica y, por imitación, el resto de la población, prenden de su solapa una amapola o un broche que imite la forma de la flor. Este símbolo tiene una larga historia.

Tradicionalmente, la amapola ha sido asociada a la muerte debido al intenso color rojo de sus pétalos, que recuerda a la sangre recién derramada. Asimismo, las amapolas eran las flores más abundantes en los campos franceses y holandeses, en los cuales se desarrolló gran parte de la contienda.

A toda esta simbología previa hay que añadir el celebérrimo poema compuesto por John McCrae sobre la Gran Guerra y en el que, con especial ternura, el autor describe esos mismos campos de amapolas y los soldados que allí perdieron la vida.

Es por ello que la amapola se convirtió rápidamente en un poderoso símbolo para rememorar a los combatientes caídos y cuya carga emocional se conserva intacta hasta hoy en día. Este fervor se puede observar en la dedicación de los ingleses con esta fiesta nacional al portar las amapolas con orgullo y patriotismo, según la revista especializada en historia BBC History Magazine.

Es Londres, al ser la capital del país, la ciudad que con mayor entusiasmo acoge este día cuya conmemoración no termina el 11 de noviembre, sino que continúa a lo largo de todo el mes. Sin embargo, los actos más importantes se celebraron el día 11 de este mes, entre los que cabe destacar los diversos homenajes que tienen lugar en varias bases militares. Especialmente emotivo ha sido el celebrado en el National Memorial Arboretum, un gran parque situado en Staffordshire, de acuerdo con el periódico The Guardian.

La ciudad es testigo de multitud de actos entre los que destacan los desfiles militares. Cada sección del Ejército organiza su pequeño desfile por las calles de Londres. Uno de los puntos más ajetreados es la Abadía de Westminster, ya que sus jardines adyacentes se siembran con pequeñas cruces blancas de madera representando cada una a un soldado caído junto con su consiguiente amapola.

A los pies de la Abadía tiene lugar uno de los desfiles más polémicos: el que organiza la Orden de Orange, la conocida organización protestante conservadora que aboga por la permanencia de Irlanda del Norte en el Reino Unido.

Pero el Remembrance Day no se limita únicamente al recuerdo de aquellos soldados que fallecieron en la guerra, sino que también es una oportunidad para las asociaciones de veteranos de toda la Commonwealth para recaudar dinero para sus miembros.

Sin ir más lejos, el año pasado se recaudaron más de 16,5 millones de dólares (más de 15,3 millones de euros) sólo para la Legión Real de Canadá, según indica la página web del mismo organismo.

Frivolización de la guerra y patriotismo exacerbado

A pesar del evidente éxito de esta fiesta nacional entre la población británica (incluida una gran cantidad de jóvenes que nunca han vivido una guerra), algunos colectivos de veteranos británicos han expresado sus temores sobre una “excesiva frivolización de la guerra” y lo que denominan un “patriotismo exacerbado” que se ha construido en torno al símbolo de la amapola, según un miembro anónimo del colectivo.

Estas inquietudes son compartidas por algunas de las personas que se niegan a llevar el susodicho símbolo ya que lo consideran “una glorificación de la lucha armada, en lugar de la paz”, mientras que otras se sienten orgullosas de usar su dinero para ayudar a los veteranos y animan al resto a seguir su ejemplo.

Visto 666 veces

Deja un comentario

Los comentarios están sujetos a moderación, por lo que pueden tardar un poco en publicarse o rechazarse.

Buscar

@infoactualidad_

¿Qué comemos hoy?

 
Ciencias de la Información

<PRIMEROS>

Hamburguesas con patatas

Alitas de pollo

Merluza en salsa

<SEGUNDOS>

Gazpacho 

Paella mixta 

Ensaladilla rusa

  

Infoactualidad no recaba datos personales de ningún tipo, pero emplea cookies para contar las visitas. La navegación por el sitio significa aceptar este uso.